Aug 20 - Spanish Writer Urges Spaniards to Visit Gibraltar
Here's another edition of spanish author Rafael Rossello Cuervas-mons' take on the current situation between Spain and Gibraltar:
Siempre me he considerado una persona de derechas: he defendido hasta la saciedad la esencia de España como nación y me he sentido español hasta la médula. Me ha indignado cuando catalanes, vascos o andaluces han intentado falsear la historia de nuestro país para camuflar sus disparates históricos, pero no puedo con los patriotas de salón, con todos esos, con los que puedo compartir muchas cosas, pero que se ciegan ante una realidad.
Yo creo que tan malo es ser antiespañol como ser ultraespañol porque ambos, unos y otros, consiguen que sigamos siendo esa tristemente famosa España de charanga y pandereta. Ni los catalanes son una nación ni Gibraltar es español, pero hay una diferencia, con los catalanes se aplica una respuesta patéticamente suave y a Gibraltar se le utiliza para compensar el bochornosos papel que ha hecho siempre el PP con los nacionalistas catalanes dejándose comer terreno y permitiendo que se ultrajen los símbolos que deberían ser de todos los españoles.
En una España totalmente dividida como nunca lo estuvo a lo largo de su historia, donde cada uno se siente nacionalista de su región y muy pocos anteponen su condición de español a la de catalán, o vasco, o gallego, o andaluz, es absolutamente esperpéntico ver el incremento de patriotas “españoles” que se tiran a la calle a sacar pecho ante una población que lleva trescientos años siendo y sintiéndose británica, que su único pecado es que no quieren acabar siendo una barriada de La Línea y dependiendo de la Junta de Andalucia donde se venera a Pablo Iglesias como padre de su patria.
He dado muchas vueltas por el mundo y siempre me sentía orgullosos de ser español, hasta que dejé de viajar tanto y me instalé en España y participé, como comentarista, de los sucesos que se iban sucediendo en mi país: ese desapego hacia el patriotismo, ese incremento de sentimiento regionalista y esa prostitución de nuestra historia común; en ese momento comencé a sentir envidia de esas otras naciones que se sentían orgullosas de su historia, de sus tradiciones comunes, de su bandera y de su himno.
Estos días tras ver el bochornoso espectáculo que hemos protagonizado ante los habitantes de Gibraltar, de comprobar la inmensa incultura de la que hacen gala la mayoría de mis compatriotas, de esos apasionamientos patrióticos de consolación, porque es como si buscasen cualquier oportunidad para gritar algo que tenga que ver con España y no les abucheen o les corran a boinazos, me averguenzo de ser de este país.
La gente habla de los bloques de hormigón sin tener ni idea de lo que dicen, opinan de las aguas territoriales sin saber ni lo que son, se refieren al Tratado de Utrecht si haberlo leído, escupen a los gibraltareños su posición de paraisos fiscal sin tener ni tan siquiera una noción de lo que dicen, les califican de cueva de contrabandistas sin haber estado allí, critican el bunkering que es el mismo que se realiza a diario en Algeciras y que está perfectamente regulado, se escudan en el mediambiente cuando nunca les ha importado nada, y la mayoría, la inmensa mayoría de todos esos que hoy se sienten tan españoles, han estudiado en Inglaterra y presumen de hablar un inglés de Cambridge y su imagen se aproxima más a look inglés que a uno de Albacete.
Este es un país de payasos que alrdean de cultura sin haber leído un libro y cuyo mayor logro fue estudiar unos cuantos veranos en un exclusivo british college.
A todos elloos les sugiero que vayan a gibraltar, pero no de compras a Maine street, sino a que se queden allí unos días, a que compartan la vida de los llanitos, a que conozcan cómo viven y luego, una vez hayan hecho eso, que opinen. Y si se quieren hacer defensores del medioambiente que se unan a grupos que están especializados en ello para así que no caigan en el error de decir estupideces
Words provided by Rafael Rossello Cuervas-mons
